UN APLAUSO PARA LOS SUBALTERNOS, UN RECHAZO PARA LOS SUBALTERNOS.

Dr. RAFAEL ESCALONA MÁRQUEZ

“Cuesta más responder con gracia y mansedumbre, que callar con desprecio. El silencio es a veces una mala respuesta, una respuesta amarguísima” (Autor desconocido)

“Que pocas ganas me quedaron de volver a esta feria que era tan importante, esto ha llegado al llegadero, con esta gente, cuanto tienes cuanto vales Rafael”,  eso me dijo mi Amigo “Alberto”.  Con ese nombre lo voy a llamar en este Artículo, porque si lo menciono con su nombre y apellido, de seguro algunos de los subalternos de oficio para los que aquí pido un rechazo y que muchos de ellos protagonizan la fiesta de los toros, le aplicaran el garrote impositivo del poder económico y político que pulula como la sarna de un perro callejero –con el perdón del perro-,  en el mundo del toro  y como lo conocen,  de seguro lo van a execrar.

Pero bueno, yo le manifesté –a mi amigo Alberto-, que iba a tratar de escribir algunas notas, así me apliquen el “principio” muy común en estos tiempos de, que si no eres “leal, obediente y subordinado”  y se te ocurre escribir algo en contra de unos de los subalternos para los que aquí pido un rechazo, me van a tildar de lo que menos me puedo imaginar;  y de seguro muchos de los que aquí se den por aludidos van a “relinchar”. Pero bueno, lo dejaré al libre albedrío de Ustedes, respetados Lectores.

Un aplauso para los Subalternos que luchamos para defender y dignificar la Fiesta de los Toros en Venezuela; incluyendo a esa gran mayoría de venezolanos amantes de la Fiesta que queremos ir a una Plaza de Toros a ver un buen espectáculo y, a aprender de él. Un aplauso, para los Toreros Venezolanos, de a pie y de a caballo que han demostrado, que con voluntad y seriedad, sin lidiar algunos de ellos ni una sola corrida, nos dieron una gran lección que si se pueden hacer las cosas, al extremo que si pudieran torear de manera más regular, no me imagino que hubiera pasado en el recién finalizado Carnaval Taurino de América. Un aplauso para los Toreros Extranjeros, la mayoría de ellos son subalternos de la lucha para engrandecer el mundo del toro y su fiesta, por eso vinieron a justificarse.

Un aplauso para “algunos”  Ganaderos, que llevaron toros toros a la Plaza, otros con las consabidas deficiencias, aunque ningún ganadero quiere que sus toros les salgan malos. Un aplauso, para los Subalternos de la verdadera Fiesta, las cuadrillas que dieron todo de si; Mozos de Espadas; Ayudas; Picadores; Mulillerros; Areneros; Alguacilillos; Personal de Plaza y muchos otros que demostraron que debemos ser subalternos, pero de la Fiesta de los Toros.

Un rechazo, para aquellos subalternos de los intereses personales de algunos protagonistas de la fiesta. Esos que prefieren cuidar sus parcelas de poder, no importa si dañas a los demás protagonistas de la fiesta de los toros.

Un rechazo a los Subalternos de los intereses políticos, esos que fueron protagonistas de excepción en este pasado Carnaval Taurino de América, esos que convirtieron todo en un verdadero “carnaval”; elementos vestidos con un ropaje taurino, pero enchufados de turno que pulularon durante el periplo ferial en el callejón y en el palco oficialista, asesorando a esos subalternos, manejadores  del “dinero bueno”  que impartían ordenes;  decidiendo a sus anchas que se podía hacer y que no;  y que cual dictadorzuelo de pacotilla apoyado por esos intereses politiqueros, hizo y deshizo en estas ferias pasadas.

Un rechazo a esos Subalternos mediocres, que teniendo facultad y capacidad de decisión, se dejaron manipular y cual anodinos “se miraban el ombligo” ante las aberraciones cometidas durante el periplo taurino, comportándose como los propios  jala MECATE  acatando todas las imposiciones y ordenes que les daban.

Un rechazo a esos enchufados del mundo del Toro, que mientras unos estamos analizando como luchamos contra quienes quieren eliminar la Fiesta de los Toros, esos subalternos de lo malo de la fiesta están pensando como cumplen “ordenes  superiores” así dañen, sometan al escarnio público y destruyan a quienes si le hemos puesto el pecho a la brisa, sin importar que se ha cultivado una amistad, porque para esos subalternos es más importante cuanto le entran a sus arcas. 

Nuevas épocas vendrán para la Fiesta de los Toros en Venezuela, pero primero tenemos que pasar por muchas tempestades que se avecinan este año en contra de la Fiesta de los Toros en nuestro País. Ojala cuando nos demos un instrumento legal que nos ponga a “raya” a todos sin excepción; y que no favorezca los intereses  de algunos en detrimento de otros. Dios me dé la licencia de ver a esos subalternos que tanto daño hacen a la Fiesta de los Toros en Venezuela, teniendo que desempeñar las funciones cada uno como se deben cumplir sin “acatar órdenes superiores”.

Aquí cabemos todos, no podrá haber jamás animo de revanchismo, pero es una verdadera lástima, que hallan  algunos  protagonistas de excepción del deterioro progresivo de la Fiesta en Venezuela. Hahhhh malaya, si lo sabré yo; que los tuve “metidos en la muleta” cerquita hasta dándome plata sin pedírsela y comiendo en restaurantes con ellos; con Diputados y Políticos y otros personajes más; me llevaban a sus casas asustados porque sus intereses se les podían venir abajo. Y hoy piensan que tienen a Jesús Cristo  agarrado por la Chiva. Este rechazo va, para los subalternos dictadorzuelos que mandan más que cualquier tirano;  y para los subalternos que pudiendo mandar “se miran el ombligo”, seria mejor que renunciaran y vayan a la Plaza a ver Toros como un aficionado más. Amanecerá y veremos que pasa este año, hasta ahora solo comienza todo, se acordaran de mí,  ya se han dado las dos Ferias Taurinas  más importantes de Venezuela y no sabemos que va a pasar.

Ojala, que para el próximo “Carnaval Taurino de América”, mi Amigo “Alberto”  me diga: Mira Rafael,  quiero regresar; esta Feria se recuperó y volvió a ser muy importante, ahora es cuando tengo ganas de venir a Mérida.  Por lo menos, “Alberto” como digno aficionado y representante de la Fiesta de los toros estará más tranquilo, de seguro vendrá; en cambio yo, no sabré si hasta  a la Plaza me dejen entrar el próximo año, de raro nada tiene.